la Sociedad Orientalista Alemana

La Sociedad Orientalista Alemana fue una institución nacida a finales del siglo XIX en Berlín con la intención de dar a conocer yacimientos del Oriente Próximo y obtener objetos para el Museo Real de Berlín mediante la realización de intervenciones arqueológicas. ¡Entra y conoce más de la Sociedad!

Museo Real de Berlín

Antecedentes a la creación de la Sociedad Orientalista Alemana. Aunque para entender la aparición de la Sociedad Orientalista Alemana, en su idioma original Deutsche Orient-Gesellschaft (DOG), hay que retrotraer la mirada a principios del siglo XIX, cuando se despertó en Alemania un fuerte interés por la asiriología, en 1799 ya se creó la Academia de Arquitectura de Berlín, que va a ser un foro de estudios sobre la arquitectura del mundo clásico.

La Academia de Arquitectura de Berlín

La Academia enseñaría historia de la edificación y de la construcción, desarrollándose una metodología de excavación. En Berlín se interesaron por por las técnicas de construcción y no por el arte, algo que luego iba a ser una de las señas de identidad de la Sociedad Orientalista Alemana.

La Academia de Arquitectura de Berlín

El propio Federico Guillermo IV en 1830 envió una expedición a Egipto que trajo consigo piezas que formarían parte del museo egipcio, y unos años más tarde, en 1846, se adquiere la estela de Sargón II. A la vez, fueron apareciendo en Alemania especialistas en el antiguo Oriente que introdujeron la asiriología en las universidades de Berlín y Leipzig.

En 1878 surgió la primera promoción de asiriólogos alemanes, entre los que se encontraban algunos de los que unos años después trabajarían con Koldewey en Babilonia. Se empezaron a editar revistas y comenzaron a reunirse antigüedades orientales que, hasta entonces se encontraban dispersas. Así las cosas, no es de extrañar que en los últimos años del XIX se fundase el Comité Oriente, La Revista de Literatura Oriental, el Departamento del Próximo Oriente del Museo Real de Berlín y la Sociedad Orientalista Alemana.

La fundación de la Sociedad Orientalista Alemana

En junio de 1887 se fundó el Comité Oriente con el objetivo de excavar en Oriente y recopilar piezas para formar un museo como los que se estaban formando en París y Londres. Pero varios miembros del comité Oriente se dieron cuenta que necesitaban vincularse a personas más influyentes para obtener un mayor presupuesto. Así nació la Sociedad Orientalista Alemana.

La Sociedad Orientalista Alemana fue fundada el 24 de enero de 1898 por varias personalidades políticas, hombres de negocios, asiriólogos y egiptólogos. La sede se estableció en el Museo de Berlín y su objetivo era el estudio del antiguo Oriente, darlo a conocer al gran público y formar una colección de antigüedades. El principal motor de la Deutsche Orient-Gesellschaft (DOG) fue el comerciante James Simon, un coleccionista de arte que aportó 3000 marcos alemanes para la primera campaña de excavación en Babilonia.

La consolidación de la Sociedad Orientalista Alemana

Con el apoyo de James Simon, la Sociedad Orientalista Alemana pronto empezó a crecer. En tan solo un año ya tenía más de 500 miembros. Pero una de las razones principales de su crecimiento fue el apoyo que recibió del kaiser Guillermo II. La Sociedad recibió subvenciones públicas y comenzó a publicar su propia revista que contaba con 3 o 4 números al año. Desde el principio la Sociedad Orientalista Alemana buscó un sitio para excavar en Oriente y se debatió si este debía ser Babilonia, Uruk, Larsa, Assur o Nínive.

La Sociedad Orientalista Alemana en Oriente

Finalmente los miembros de la Sociedad Orientalista Alemana se decantaron por Babilonia y encargaron dirigir la tarea a Robert Koldewey. Los objetivos que la sociedad le pedía era excavar edificios y hacer alzados para después publicarlos, sacar buenas fotos y conseguir piezas para el Museo Real de Berlín. Sin embargo, la Sociedad pronto comenzó a excavar en Nimrud, Abu Hatab, Assur, Kar Tukulti Ninurta, Hatra o Uruk.

En la excavación de Babilonia se aprecian con claridad la experiencia de la arqueología hasta entonces y las nuevas aportaciones de los alemanes. Koldewey levantó un plano general del área arqueológica de Babilonia, cuadriculado por una red de coordenadas, y donde se irían indicando las cotas por referencia a un punto cero fijado en el Kasr.

En las publicaciones dedicadas a los templos se incluyen minuciosos planos en los que se precisa cada adobe y ladrillo, incluyendo secciones estratigráficas hasta la capa freática. Gracias a esta detallada información los arqueólogos de la Sociedad Orientalista Alemana podían proponer hipótesis de reconstitución de edificios. En el volumen dedicado a la Puerta de Ishtar demostraba su atención a «las leyes de la construcción» y a los principios de los antiguos, con numerosas fotografías entre texto y unos planos y cortes excepcionales.

Tiempos de crisis para la Sociedad Orientalista Alemana

Tras la I Guerra Mundial la protección del kaiser a la Sociedad Orientalista Alemana desapareció. Durante la República de Weimar siguió funcionando con gran prestigio, incluso se comenzó a excavar en nuevos yacimientos. pero el III Reich provocó un descenso del número de miembros de la sociedad. Algunos murieron en la guerra y los que eran judíos dejaron de pertenecer a ella. Además, con la II Guerra Mundial se paró gran parte de la investigación arqueológica.

El renacimiento de la Sociedad Orientalista Alemana

En 1947 surgió la idea de fundar de nuevo la Sociedad Orientalista Alemana. Aunque en este nuevo comienzo solo contaba con 250 miembros estaría dirigida por Walter Andrae. Ahora se retoman las excavaciones de Hattusa y Uruk y se editan los resultados de excavaciones antiguas. A partir de 1967 al frente de la Sociedad se sitúa Ernst Heinrich, realizándose excavaciones excavaciones como la de Habuba Kabira.

Fernando

Fernando

Me llamo Fernando Espejel y soy doctor en Estudios del Mundo Antiguo por la Universidad Autónoma de Madrid y la Universidad Complutense de Madrid. Me apasiona todo lo relacionado con la arqueología del Próximo Oriente y he participado en diversos congresos nacionales e internacionales.